Galería Caipirinhas Candomble and Soup and Rainnn Bahia
Salvador de Bahía, Brasil 2012
® Aliona Londono
Regresar a Bahía ha sido una experiencia estupenda. Tenía un poco de miedo que esta vez no iba a ser tan mágica como la última, que esta vez el grupo no sería tan simpático como en marzo… pero afortunadamente esta vez ha sido también genial y la magia de Bahía ha vuelto a estar con nosotros. Me he sentido muy afortunada de conocer a Cándida, Daneè y Daniela.
Ernesto me ha dado la oportunidad de conocer a grandes fotógrafos, muchos de ellos discípulos suyos, en los queda perfectamente reflejada la impronta de su magisterio. Y es digno de loa la capacidad que tiene de transmitir la pasión y el espíritu crítico por un arte como la fotografía, un arte al alcance de muchos, pero tan sólo verdaderamente dominado por unos pocos. Aliona Londono
® Candida Vivalda
Participar en el workshop con Ernesto en Bahia ha sido una ocasión sumamente valiosa. Me han sorprendido, involucrado, emocionado profundamente su dedicación, su participación y su autentico interés, demostrado día a día, de hora en hora, en el camino fotografico individual de cada uno de nosotros. Ernesto es un gran maestro de vida y un hombre generoso, capaz de compartir sus conocimientos con todos y cada uno de nosotros a pesar del cansancio, a pesar de las dudas y las desilusiones a las que a veces hay que enfrentarse en el difícil camino para crecer como fotógrafos.
Ernesto me ha acompañado con paciencia, cariño y seriedad al mismo tiempo, ha logrado hacerme descubrir “hilos” profundos en mis fotos, que hablan de mi. Algunas de sus palabras siguen aquí, dando vueltas en mi cabeza, y me van a acompañar para mucho tiempo.
He tenido la inmensa suerte de compartir este workshop con 3 mujeres maravillosas, a las que agradezco con todo mi corazón su alegría, generosidad y cercanía en cada momento: sin ellas este camino no hubiera podido ser así de intenso y satisfactorio. Gracias. Candida Vivalda
® Danée Shows
Viajar a Bahía con Ernesto es como tratar de asimilar una pintura de Monet por primera vez e lograr solamente rasguñar la superficie de su compleja belleza. Mi experiencia fue una lección de paciencia, de ruminación, y de humildad. De repente, me convertí a ser una niña otra vez luchando y intentando capturar el poético paisaje bahiano y su gente; deseando ardientemente de atrapar su esencia en una fracción de segundo y de lograr fotografiar un sentimiento que iría más allá de un simple a foto con una buena composición. Ernesto me ayudó a hacer exactamente todo esto. Renovando diariamente mi desafío y diciéndome de tener confianza en mi intuición, me asistió en deconstruir mi vieja manera de ver y me abrió el camino por una nueva trilla que me permitió trascender la realidad y poder utilizar una nueva perspectiva.
Debo absolutamente mencionar las vibraciones colectivas positivas de todo el grupo. Las otras chicas me ayudaron con su soporte y a la vez me invitaron a aceptar el desafío. En lograr ver la gente a través de su lente, aprendí no solamente lo que funcionaba o no dentro de una foto sino también me inspiró a continuar a fotografiar y a no retroceder. Sin la ayuda de cada uno de ustedes, nunca hubiera logrado hacer los grandes avances que hice. Danée Shows
® Daniela Talavera
Estos 10 días en el taller han significado, de alguna manera, un antes y un después en mi fotografía. Creo que la experiencia en Bahía ha generado en mí una seguridad de placer en el trabajo que realizo. Son infinitas las palabras de cariño a todas aquellas personas que conocimos en el camino (Mariani, Bruna, Agripina y otras); toda su energía está ahora siempre conmigo.
Todo el trabajo realizado en estos días tiene esa magia única inexplicable. Ha sido lindo compartir este tiempo con personas que sé que serán almas amigas el resto de la vida (Ernesto, Cándida, Aliona y Daneé: qué bien tenerlos conmigo! gracias por regalarme días tan bonitos). La sensación de saber reconocer la magia en una situación ya es para mí la mejor foto. Disparar con el alma y lograr ver más allá de lo real y meramente descriptivo ha sido el reto constante y probablemente lo seguirá siendo… Estoy contenta que sea así.
Además del intercambio humano en el taller, me gustó mucho el trabajo de crítica y edición diaria con Ernesto… creo que de alguna manera, es un paso difícil y lleno de sensaciones lindas y contradictorias que te dejan una satisfacción real. Fue fascinante poder participar en el proceso de edición del nuevo libro de fotos panorámicas “Isla” de Ernesto. Como se lo dije ya a él, siento que será su mejor libro cubano, su “cuento” más necesario… las imágenes hablan, discuten y se envuelven entre sí para finalmente llegarnos directo al alma.
Ahora, sólo me queda decir que esta experiencia ha logrado que mi “ojo interno” se despierte para no irse a dormir nunca jamás. Daniela Talavera