Galería Due Ricce e Una Liscia
Napoles, Italia 2014
® Emanuela Cristiano
Ernesto es un gran fotógrafo, te enseña a prescindir de lo que no sirve, te enseña a explorar la ciudad, a sumergirte en el flujo continuo de eventos para esperar que se te presente el momento apropiado para fotografiarlo. Tú debes solo lograr ver las cosas con un ojo libre, paciente y poético a la vez.
Durante el taller charlamos de fotografía, sonreímos, compartimos nuestras visiones, exploramos una ciudad maravillosos y verdadera como Nápoles acompañados por nuestras emociones y el amor por la búsqueda que creo comuna con todos aquellos que deciden tomar un taller tan intenso y anárquico.
La edición colectiva es el momento más lindo del taller, la confrontación del trabajo de todos es muy útil y funcional al crecimiento de cada participante. Personalmente apruebo mucho el método de Ernesto, el ponerte al mismo nivel, preguntarte consejos y opiniones, mostrarte los proyectos futuros y hablarnos de su manera de entender la fotografía y la edición.
Nápoles se presta a ser fotografiada, hay mucho que ver, explorar, probar, mucho por lo que emocionarse: es una ciudad única en el panorama europeo y mundial y es rica de historia y de cultura, de propiciación y de rituales, vida y muertes se entrelazan en los rostros de la gente, en los lugares, en las estaciones, en el perfil físico de aquel mar alegre y triste, dulce y suspirado.
Si están pensando frecuentar un curso de fotografía y están confundidos de el abundante oferta de escuelas y de cursos, o si están pensando que necesitan un maestro que lo pueda ayudar a trazar un recorrido para ustedes, no duden en inscribirse en un taller de BazanPhotos. Son viajes fotográficos pero también recorridos de tu propia alma. Los lugares escogidos por Ernesto son siempre sugestivos, fuera de las rutas comunes. Obviamente hay el riesgo de perderse pero si uno se encuentra consigo mismo es una gran felicidad!
Llevo dos días de vuelta a mi casa y extraño Nápoles, siento falta de sus olores, de sus sabores, el sonido del acento napolitano. Me hace falta conversar con Ernesto, escuchar su opinión sobre nuestro trabajo y de los demás fotógrafos. Extraño vivir Nápoles y quedar sorprendido cada vez, gozar de la oportunidad de poder vivir como turista, de viajante, de amigo, de conocedor y de aprendiz en aquel mágico lugar.
Guardo un recuerdo especial de Juan que se quedó con nosotros solo pocos días pero que supo dejar una huella positiva sobre todo nosotros con su presencia pura y su gran sensibilidad. Ciao Juan! Y gracias Nápoles, gracias Ernesto, tú lleva un increíble valor agregado a toda la fotografía. Emanuela Cristiano
® Fabio Barzaghi
Mi primer taller con Ernesto. Diez días en la desordenada belleza de Nápoles que supo sorprendernos cada día de manera distinta. Un taller experimental, en una búsqueda casual de ocasiones y momentos fotográficos. Por la mañana revisión del trabajo del día anterior. La severa valoración de Ernesto, siempre justa y honesta, permitió que mis fotografías mejorarían día tras día.
Mi taller con Ernesto no fue solamente un workshop donde tirar fotos. Porque tuve la extraordinaria posibilidad de compartir muchos momentos para charlar de fotografía a 360° con Ernesto y con su amigo especial Salvatore Esposito que acaba de ganar dos segundos premios en el Sony Awards. ¡No sucede todo los días!
Tampoco vivimos solo de fotografía, de hecho Ernesto compartió con nosotros sus trabajos pasados, aquellos en los que está trabajando y de sus sueños futuros, y tuvimos también el honor de ver algunas copias de trabajo que nadie había visto antes. También Ernesto compartió los trabajos de algunos de sus estudiantes cuyas fotos serán publicada por BPP en los años venideros. ¡Un verdadero privilegio! De manera especial aprecié mucho un aspecto de la manera de ser de Ernesto: el hecho que a parte de darnos consejos él es súper atento a las observaciones que hacen sus estudiantes.
En fin quería también darle las gracias a Juan con el cual tuvimos la oportunidad de compartir solamente los primeros días en Nápoles. Fabio Barzaghi