Galería Cristal Clear

Ecuador 2005

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® Bob Cocozza

 

Han pasado ya dos semanas de mi regreso desde el Ecuador y de mi ultimo trago de Cristal, aquella bebida alcohólica salvajemente potente. No estoy completamente seguro, pero creo que las funciones de mi hígado están regresando a la normalidad; mi voz aún quedará quizás alterada para siempre.

Aunque los Ecuatorianos sean gente hospitalaria y amistosa, fotografiarlos puede ser un verdadero desafío como son tímidos y introvertidos. De toda forma, largos días, la persistencia y la ocasional fotografía milagrosa me han dado la posibilidad de tener un mínimo numero de buenas fotografías.

Nuestro grupo, Cristal Clear, era una ecléctica colección de nacionalidades con un objetivo común: divertirse y sacar unas fotos de la vida cotidiana memorables.

Hemos pasado muchos momentos inolvidables como grupo, pero los fuegos artificiales aquella noche en Girón son el recuerdo mas agradable. Durante aquel increíble juego de luces, hombres con una figuras de papel mache atada en sus hombros corrían desenfrenadamente por toda la plaza mientras unos cohetes venían lanzados por estas figuras. ¿Donde estábamos nosotros del grupo Cristal Clear? Exactamente en el medio del pandemonio, buscando simultáneamente de fotografiar y de evitar los cohetes!

¿Donde se inserta Ernesto entre Cristal Clear y los juegos artificiales? En el centro de todo esto, hacendosos de mentor y alentándonos a tomar riesgos con nuestras fotos. Después durante las sesiones de edición, Ernesto te daba los mejores consejos para hacerte devenir un mejor fotógrafo: su honesta opinión. Bob Cocozza

 


 

® Giorgio Negro

¿Tomar o no tomar ? Esto es el dilema.
Despertarse temprano, salir de prisa, viajar lleno de entusiasmo, con las ganas de fotografiar en el bolsillo.

Llegar allá en aquel pueblo perdido donde la foto del año me esta esperando, mis dedos ya listos para tomar al vuelo y…NO, a darme la bienvenida no esta la imagen que me va a dar la fama. NO, y en su lugar una sonrisa sin dientes, una mano arrugada que me brinda un vaso lleno de una bienvenida a 5o grados alcohólicos, de aquellos que mi esófago nunca olvidará tan fácilmente, por lo menos no por todo el día.

Pero quizás el alcohol liberará mi espíritu, arrojará los frenos inhibitorios de mi imaginación, aún anclada a parámetros clásicos y abstemios. ¿ Me ayudará el traguito de Cristal a atrapar aquel momento que siempre se me había escapado y a clavarlo para siempre en mi rollo de Tri-X.?

Eso es lo que creí, ingenuo y débil de voluntad y de estomago. No he sabido decir que no, he aceptado la bienvenida hasta el fondo del vaso, asegurándome de pasada una perfecta gastritis ecuatoriana.

¿Valió la pena? Quien quiere conocer la respuesta vaya y pruebe el mismo. O mire mis fotos… Giorgio Negro

 

 


 

® Nick Goodey

Ecuador es un gran lugar… a menos que no sea un toro. En los once días de estancia, vimos a tres tener un mal fin: dos en un increíble ritual que implicaba el degollo, y mientras los animales están aún vivos la gente tomaba su sangre caliente, y un tercero durante una más tradicional corrida. Además hemos asistido también a un rodeo de toros, donde los amantes de los animales estarán contentos de saber que un toro se escapo enfurecido y cargó la muchedumbre.

Si todo esto resultara cruel, reflejen acerca del hecho que en nuestra cultura matamos miles de animales de la manera más bárbara y inhumanas posible sin ningún respeto por el animal. Esta gente en comparación mataba solo como parte de un ritual que tiene un gran significado en su cultura. No, creo que la única real crueldad que hemos visto haya sido practicada con nosotros cuando teníamos que tomar esta bebida alcohólica llamada Cristal, una mezcla que te hace derretir tu laringe y te deja sin voz después de medio vaso. Nick Goodey

 



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