Galería Circles
Chapada Diamantina, Brasil 2017
® Frank Baudino
He perdido la cuenta del número de talleres que he asistido con Ernesto, pero, una vez más, me llevó a un lugar mágico. Lo que más me ha impactado en la Chapada Diamantina es el calor y la extraordinaria amabilidad de la gente que conocimos. La mayoría de nosotros entró en los hogares de las personas como extraños y sin embargo nos dieron la bienvenida en sus casas y nos permitieron fotografiar libremente. La gente tenía muy poco a nivel material pero compartían todo lo que tenían con nosotros. El espíritu de la gente que conocimos fue uno de apertura y amistad combinada con la determinación de ser libre y vivir la vida a su manera. Los hogares donde entramos eran muy modestos y a pesar que la tierra a sus alrededores estaba muy dura siempre había espacio para plantar flores y cuidar de las mascotas.
Agradezco a Ernesto y los otros estudiantes que compartieron su trabajo y que me han ayudado a continuar expandir mi visión fotográfica y ampliar mi idea de lo que es una buena fotografía. Frank Baudino
® Geralyn Shukuwit
Volver a Bahía con mi familia fotográfica, y volver, una vez más, con las familias de Bahía, fueron los dos aspectos más destacados de mi visita a Brasil. Viejos y nuevos amigos, visitando a las personas a las cuales nos sentimos cerca, y actualizando nuestras vidas, y la emoción que sentimos volviéndonos a ver, compartiendo imágenes y comidas todos juntos. La vida se mueve entre nuestras visitas, y en este viaje donde varios amigos subieron al cielo fue nuestra realidad: Orlando, Manuel, el joven que vivía en casa de Joao, y luego se fue mi tío… hubiera sido insoportable si no hubiéramos estado todos juntos. Alicia y Carmina son la fuerza y el pegamento de sus familias, y yo también estoy agradecida a mi familia fotográfica, a Sissy y a Ernesto que estuvieron todos muy cerca de mi en tiempos difíciles. Ninguno de nosotros tuvo un viaje fácil: todos estuvimos enfermos por varias razones, pero todos encargándonos de todos, asegurándonos que estábamos bien. Familia. Que se vaya al infierno el diablo!
Esta vez fue realmente un momento donde los círculos se cerraron y, afortunadamente, continuarán abriéndose. Hasta la próxima vez mis amigos! Geralyn Shukuwit
® Juan Pablo Ampudia
Imágenes y comentarios en proceso
® Romain Fournier
® Tamar Granovsky
Quiero agradecer a Ernesto (o Bazán como me he dado llamarle con el pasar del tiempo) para conducir los dos grupos en los que he participado (uno tras otro) tanto en el Reconcavo Bahiano como en la Chapada Diamantina. Gracias a él, nosotros, los estudiantes fuimos capaces de evitar algunos de los lugares típicos de Salvador, Itaparica, Cachoeira y Chapada Diamantina. Y gracias a él, durante nuestras sesiones de edición diarias, hemos aprendido a salir de los clichés.
En cuanto a mi trabajo, he aprendido que tienden a ir hacia la dirección donde otros no van. No hago esto por ser diferente o no conformista, sino para encontrar mi espacio y mi ritmo. Aprendí que para expresarme a través de la fotografía no hay fórmulas. Participar en conversaciones con Bazán y otros, y mirar las obras de cada uno de ellos fue absolutamente fundamental en este descubrimiento.
Este viaje a Brasil me ha abierto los ojos a diferentes niveles. Sentí que estaba caminando sobre una cuerda delgada tanto en los lugares que visitamos como en mi trabajo. En cuanto a Brasil, me puse muy consciente de que detrás del mito de la Bahía mágica y espiritual hay un mundo muy difícil y, a veces, muy duro, de los pobres, de los sin tierra y de la gente sin hogar, personas que todavía sufren, pero sin embargo, está determinada a superar los obstáculos. Luchan diariamente para sobrevivir y no siempre tienen éxito. En cuanto a mi trabajo me he dado cuenta de que tengo que sentirme cómoda conmigo misma y hacer lo que es correcto para mí. Es algo que sé, pero no siempre puedo recordarlo y actuar de consecuencia.
Gracias a Bazán, Frank, G, Romain, Tammy y JP por todo. Tamar Granovsky
® Tammy Merino
Sólo puedo sonreír cuando recuerdo mis días en Brasil, esas dos semanas mágicas donde estaba presente en nuestro destino el poderoso espíritu de Yemanjá, como le gusta decir a Ernesto. La vida siempre se encarga de ponerte en el lugar donde necesitas estar, y en este caso cada persona y cada camino nos llevó a momentos e historias subjetivas imposibles de olvidar o incluso de capturar en una fotografía. Estos son los momentos que cambian tu vida para siempre, porque no importa si has tenido un buen o un mal día, todo en esta vida es una lección para crecer, y estoy muy agradecida por la oportunidad maravillosa y mágica para unirme a uno de los talleres de Ernesto ganandome la beca de la BPW.
Ernesto y el grupo me han guiado en un viaje increíble, lleno de sorpresas y de crecimiento, donde me desafié con la fotografía todos los días, y donde se han ampliado mis conocimientos y mi alma. Estos catorce días estuvieron llenos de amor, de respeto y de aprendizaje, y me han ayudado a ver mi trabajo de una manera más madura y sensata. Mi proyecto en Brasil es cada vez más consistente, fuerte e íntimo gracias a la ayuda de Ernesto, G, Juan Pablo, Romain, Tamar y Frank. Amigos obrigado! Siempre estaré agradecida por este tiempo único y valioso juntos, y siempre recordaré las emergencias de cerveza, la siesta en el coche, la risa loca de Sissy y el momento mágico que pasamos juntos con las familias que nos recibieron con tanto amor y gratitud. GRACIAS Y AMOR AL GRUPO CIRCULOS !! Tammy Merino
